jueves, 25 de noviembre de 2010

Posesión del ayer

Tal y como un barco tiene que regresar a puerto para avituallar, este blog tiene que regresar a Jorge Luis Borges para retomar el aliento.

Posesión del ayer
Sé que he perdido tantas cosas que no podría contarlas y que esas perdiciones, ahora, son lo que es mío. Sé que he perdido el amarillo y el negro y pienso en esos imposibles colores como no piensan los que ven. Mi padre ha muerto y está siempre a mi lado. Cuando quiero escandir versos de Swindburne, lo hago, me dicen, con su voz. Sólo el que ha muerto es nuestro, sólo es nuestro lo que perdimos. Illión fue, pero Illión perdura en el hexámetro que la plañe. Israel fue cuando era una antigua nostalgia. Todo poema, con el tiempo, es una elegía. Nuestras son las mujeres que nos dejaron, ya no sujetos a la víspera, que es zozobra, y a las alarmas y terrores de la esperanza. No hay otros paraísos que los paraísos perdidos.

Jorge Luis Borges

viernes, 12 de noviembre de 2010

Alea jacta est (II)

Las aguas del Rubicón están demasiado frías (a diferencia de Julio César, yo no traigo caballo). Además el enemigo ha herido mi rodilla izquierda. Tras evaluar la situación comienzo mi retirada, de regreso a la orilla desde donde partí hace sólo unos días. A lo lejos veo a la jaiba brava gesticular lo que percibo como probables mentadas de madre. Seguiré informando.